Consentir está bien, tanto y cuando, esa condescendencia le brinde a la mascota un bienestar físico y mental.
Escribe: Redacción de Capu y Bigotes
Mucho se habla de este tema sin darle antes una buena dirección correcta. Primero conceptualicemos la palabra engreír, esta significa en su denotación: hacer que una persona adquiera un sentimiento de orgullo o vanidad. Así que descartemos la idea de engreimiento en los cachorros, y propongamos la palabra: consentir, dado que ella en su sobre exceso desemboca en el engreimiento.
Dicho ello, definamos que no es correcto engreír sea cual sea el motivo. Pero, mejor reformulemos el título de este texto, y preguntemos, ¿es bueno consentir a tu perro? La respuesta la encontrarás líneas más abajo.
Consentir está bien, tanto y cuando, esa condescendencia le brinde a la mascota un bienestar físico y mental.
Lo que quiere decir:
Pasear con él o ella
Déjalo o déjala que disfrute nuevos lugares, que olfatee, explore y haga nuevos amigos.
Darle el mejor alimento posible
Una buena dieta le ayudará a mejorar su calidad de vida y a estar sano y fuerte.
Comprarle juguetes interactivos que estimulen su mente
Fíjate que sea un juguete especialmente diseñado para perros, no tóxico y que además sea un juguete inteligente.
Asegúrate de darle un espacio dentro de casa
Ese espacio es donde tu mascota pueda tener su cama y descansar del ruido.
Dale prioridad a su salud
Si quieres consentirlo asegúrate de que no le duela nada y no tenga alguna enfermedad silenciosa. Los perros aprenden a vivir con una cantidad de dolores invisibles para nosotros. Practícale por lo menos una vez al año un análisis de sangre, heces y orina completo.
Complementa el cariño con una óptima rutina
Los perros necesitan pasear todos los días y tener actividad tanto mental como física. Realiza una rutina que satisfaga sus necesidades y tendrás un perro feliz.
El plus
Qué no hacerle a la mascota para evitar el engreimiento:
- Darle probaditas de comida.
- Alimentarlos con golosinas.
- Cargarla.
- Comprarle ropa costosa.
- Pasar por alto sus travesuras.
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